Desde la Subsecretaría del Agua de esa provincia, explicaron que hay una mayor erogación desde el Dique Frontal, debido a las lluvias que se registran en la cuenca alta y media de Tucumán. Sin embargo, remarcaron que no hay complicaciones, ni riesgos de inundación con los actuales niveles de erogación.
 

Explicaron que por "impacto de las lluvias en la cuenca media y alta en Tucumán, se llegó casi a la cota 272 del Dique Frontal (por debajo casi 30 centímetros). Esa cota de 272 metros sobre el nivel del mar, se denomina cota de nivel de espera de crecientes. Eso significa -detallaron- que a partir de esa cota lo que ingrese en el embalse sale hacia el río Dulce". 

"Tenemos oscilaciones promedios, hemos empezado aumentando la erogación de 110 m3 a 150 m3 y así paulatinamente. Y ahora estamos oscilando entre 300 a 350 m3 (de erogación). Si sube o baja (el caudal), va a depender de los futuros aportes que tenga la cuenca", apuntaron.

No obstante, la información que tienen en el organismo es que "han disminuido las lluvias (en las cuencas media y alta) por lo que creemos que vamos a disminuir (la erogación aguas abajo del dique)".

"En este momento estamos con 310 m3 de ingreso por lo que es 310 m3 de egreso hacia el río Dulce. Tenemos que seguir esperando cómo se comportan las precipitaciones", se detalló.

El informe aclaró que la cota 272, significa estar en alerta de crecientes. "Hay un protocolo de seguridad de presa, que exige tener una cota mínima de 272 por si viene una creciente, poder manejar sin que haya posibilidades de riesgo de ruptura. Y el piso en este época es 272, y lo que entra por encima de 272, tiene que salir (erogación)".

Y recalcaron que "aguas abajo no hay problemas por el momento, la situación se puede complicar cuando hay erogaciones arriba de los 600 m3, en lo que sería el sur de la provincia. A partir de los 600 m3, se toman medidas de alerta, "pero estamos lejos, no hay riesgo de inundación".