El azúcar es un ingrediente indispensable en la mesa de los argentinos; ya sea para darle gusto a un café, una torta, un bizcochuelo o saborizar otros postres. Incluso hay quienes prefieren acompañar la yerba con unos gramos de azúcar. Lo que se conoce popularmente como “mates dulces”. Y si bien su consumo en exceso está relacionado a malos hábitos alimenticios, puede aportar, en cantidades controladas, una buena dosis de energía a los músculos y al cerebro.

Sin embargo, tras la última subida del dólar y el alza en el precio de los combustibles, el valor del kilogramo de la sacarosa subió considerablemente en comercios de la ciudad de Santiago. Según un relevamiento por cadenas líderes, el kilo se consigue por un promedio de $570 desde hace una semana. Y las ofertas son “devoradas” por los clientes en pocas horas.

Uno de los hechos que llamó la atención de los consumidores, y bien sirve para reflejar el encarecimiento del producto es que en los mayoristas ya no se exhiben precios accesibles cuando hasta hace poco tiempo eran los preferidos por quienes buscaban “cuidar el bolsillo”.
En una reconocida cadena, ubicada sobre avenida Solis, el kilo más económico para la venta minorista salía $550 correspondiente a la marca “Ledesma”. Le seguían a $537 la marca “Chango” y “Ledesma Superior”. 

Según pudo conocer este medio, en algunos kioscos de barrios periféricos los 1.000 gramos de la azúcar de mesa ya pueden conseguirse por valores de hasta $600.