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Del Conurbano a Santiago del Estero: el padre Pepe di Paola y su traslado a un nuevo destino

El presbítero José María Di Paola, "Padre Pepe",continuará con su trabajo territorial en la provincia de Santiago del Estero a partir de enero de 2024 tras más de 10 años en la parroquia de San Martín

El cura villeroJosé María Di Paola, conocido popularmente como "Padre Pepe", anunció que comenzará un nuevo proceso parroquial en la provincia de Santiago del Estero, tras más 10 años de servicio en la diócesis de San Martín, en el noroeste del conurbano bonaerense. 

Pepe sostuvo que a partir del 2024 se mudará a Santiago del Estero para seguir guiando a jóvenes con problemas de adicciones en los barrios populares, en donde el obispo de la provincia, Vicente Bokalic, “lo necesite”.

El párroco ya tuvo una experiencia en la ciudad de Campo Gallo, en la mencionada provincia del Norte, pero debió abandonarla tras recibir amenazas de narcotraficantes en 2009, según denunció el entonces cardenal Jorge Bergoglio.

Di Paola tuvo ofrecimientos de las diócesis de San Roque, en Presidencia Roque Sáenz Peña de la provincia de Chaco, con el monseñor Hugo Bárbaro; Alto Valle de Río Negro, con monseñor Alejandro Benna y en La Rioja, con Dante Braida

“Decidí ir a una barriada popular en una ciudad como es Santiago y La Banda, que han crecido muchísimo”, sostuvo el cura, quien dejará la parroquia San Juan Bosco, de la Villa La Carcova. Además, explicó que conoce Santiago, conoce a la gente; a Campo Gallo, a los que quiere “muchísimo” y que también tiene “amigos curas en Santiago capital. Vicente y su obispo auxiliar (Enrique Martínez Ossola) son muy cercanos, gente muy buena”.

 

"Así como abrimos cancha aquí en Capital, después en el Gran Buenos Aires y después de que muchos curas fueron a Buenos Aires, ahora me voy a unir a los curas de Santiago que están trabajando en los barrios, y aportar lo mío y sumándome como uno más a la tarea misionera que se hace allá", puntualizó. 

El Padre Pepe tuvo un recorrido de dos años por el Hogar de Campo Gallo, trabajó territorialmente en la Villa 21 del barrio porteño de Barracas y se desempeñó por 14 años en La Carcova.

En un comunicado de la agencia católica AICA, detallaron que el presbítero explicó que debe ocuparse de los Hogares de Cristo, que “han crecido en todo el país”. Uno de los puntos más destacables fue que en 2008, cuando fundó el primer Hogar, eran apenas 10 personas, y en la actualidad superan los 10 mil y son “una federación que está en todo el país”.

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